La diplomacia no es una opción.

Diplomacy Is Not an Option te pone en la piel de un señor menor. Debido a las circunstancias, te ves obligado a luchar. Constantemente. Siempre en desventaja. Construye tus murallas, recluta tus ejércitos y vive la guerra a una escala completamente nueva. Más de 25.000 enemigos atacan las murallas de tu castillo. Dominarás la ingeniería, la economía e incluso la magia si quieres sobrevivir.

Tu Rey es un líder grandioso y poderoso. Además, es un cerdo egocéntrico. Le encanta beber y, en general, disfruta de la vida. Pero después de que el tesoro se agotara y ni siquiera el aumento de impuestos ayudara, quedó claro que no podía continuar con su lujoso estilo de vida. Lo cual es un problema. Especialmente para ti. Porque los campesinos, a quienes les desagradan los altos impuestos y el hambre, se están rebelando en tu feudo. El Rey te exige que sofoques la rebelión y vayas a una tierra lejana para obtener oro (se rumorea que hay una con toneladas). ¿Harás lo que tu soberano ordene y zarparás para llenar las arcas del palacio? ¿O te unirás al violento líder de los rebeldes para llevar al tirano ante la justicia? Preguntas, preguntas, preguntas. Lo único de lo que puedes estar seguro es que habrá derramamiento de sangre de cualquier manera. Y legiones de arqueros, espadachines, armas de asedio, caballeros y mucho más estarán a tu lado para ayudarte a lograr tu objetivo.

Aunque es cierto que las leyes de la física siguen siendo muy "serias" en "Diplomacia No Es Una Opción", cada flecha, piedra de catapulta y enemigo lanzado al cielo está modelado físicamente, creando un campo de batalla táctil y coherente. Simplemente asegúrate de que tus tropas tengan torretas desde las que disparar y líneas de visión despejadas, o podrías encontrarte con que tus mejores planes se ven vergonzosamente frustrados por tus propias fortificaciones. Considera tus puertas, tus líneas de avance y retirada. Crea zonas de aniquilación y posiciones de retirada. Necesitarás tomar un papel activo en el combate para sacar el máximo provecho de tus hombres.

Incluso bajo asedio, nunca olvides que tu castillo se construyó a costa del campesinado. Defiende a tu pueblo y te servirán bien. La comida puede escasear y tus soldados morir de hambre en el campo de batalla. Construye casas, entierra cadáveres para prevenir la peste y cura a los enfermos cuando la muerte llame a tu puerta. Si no te preocupas por tu pueblo, pronto podrías verte acosado por problemas muy desagradables, como almacenes vacíos, muros sin reparar y barracones vacíos.

Un ejército funcional requiere una economía funcional que lo sustente y alimente. La comida, la madera, la piedra, el hierro y el oro son los pilares de la economía de tu ciudad, y deberás vigilar cuidadosamente tus suministros si quieres enfrentarte al avance enemigo a tiempo. Reúne recursos, elige tus ubicaciones de almacenamiento y planifica tus expansiones y mejoras con cuidado. El enemigo no cederá sus tierras voluntariamente, y las expansiones civiles desprotegidas serán presa de incursiones hostiles. Comercia usando la impresionante aeronave mercante para traer suministros de emergencia de comida para alimentar a tus hombres o piedra para reconstruir las murallas. ¿Podrás encontrar el equilibrio entre una expansión ambiciosa y la seguridad?

Si la vida te da limones, haz limonada. Si heredaste un reino maldito, ¿por qué no dominar las artes oscuras? Los robustos muros del castillo te protegerán de las amenazas más comunes, pero en Diplomacy Is Not An Option también lucharás contra los no muertos. Entonces, ¿por qué darles el monopolio de la magia? Existe una oscura historia de un poder contaminado que despierta a los muertos y encarcela a las almas rebeldes. Por otro lado, también puede usarse para desatar enormes bolas de fuego sobre tus enemigos. Así que aprovéchalo también. Construye monumentos mágicos, recolecta cristales de alma y experimenta una risa frenética mientras rayos mágicos abrasadores atraviesan a tus enemigos e invocan fantasmas para ahuyentar a los rezagados.

El juego se diseñó con la libertad como concepto central. Ve más allá de la campaña y aplasta a tus enemigos como mejor te parezca en el Modo Infinito, el Modo Sandbox o el Modo Desafío. Desarrolla tus propias estrategias en mapas generados procedimentalmente. Adéntrate en las murallas desde el principio, construye grandes ejércitos de carne de cañón o adéntrate en el macrojuego de crecimiento avaricioso e inversiones costosas. Descubrir qué estilo te trae el mayor éxito depende de ti.

Como en la vida real, la estupidez y la avaricia son la causa de la mayoría de los problemas, pero aquí es demasiado tarde para hablar de ello. No hay ningún recurso para resolver esto pacíficamente. En este punto: ¡la diplomacia no es una opción!